Los desayunos, elementos fundamentales de la gastronomía actual, van a evolucionar mucho en el futuro. Es una tendencia en alza, ya analizada en la IV Cumbre de Marbella All Stars, y que hoy recuperamos por su proyección en el tiempo post crisis.
Recordamos las principales conclusiones de la Mesa de Networking que analizó el tema, moderada por el periodista José Oneto, responsable gastronómico de la cadena COPE. Los quinces miembros que componían la mesa redonda coincidieron en afirmar que éstos –los desayunos– son un elemento muy importante que contribuye de forma decisiva a fomentar un recurso turístico más, en este caso el culinario.
El turista que disfruta de sus vacaciones en un determinado establecimiento hotelero agradece sobremanera que en esa primera comida del día se le ofrezca una amplia gama de productos alimentarios autóctonos del lugar correspondiente donde esté en su tiempo de asueto. Y en Andalucía esa máxima está asegurada; por lo que los desayunos, por increíble que suene, son un gancho muy importante para atraer nuevos clientes y/o hacer que los que acudan por primera vez repitan.
Se puso sobre la mesa la importancia que tiene el aceite de oliva virgen extra de nuestra tierra, ya que cada vez se va enraizando más en el gran público la cultura del aove andaluz.
Una buena tostada con su tomate rallado, una lonchita de jamón ibérico de Huelva y rociado todo con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra es un auténtico manjar que muy pocas regiones españolas –por no decir ninguna– ofrecen.
También hablamos de la importancia que tiene la formación en el sector hotelero andaluz. En este sentido resaltamos el gran nivel de profesionalidad que cada vez se viene observando más en Andalucía. La preparación de un profesional, tanto académica como practica es clave para que ese subsector del Turismo como es la hostelería-restauración sea competitivo.
En definitiva, los desayunos andaluces son un epilogo que nos introduce en esa enciclopedia gastronómica de la que Andalucía dispone y de la que tanto podemos presumir los amantes de los fogones de esta tierra.
Por lo tanto, todos (empleados, propietarios, etcétera) tienen, o tenemos, que esforzarnos y contribuir en la medida de nuestras posibilidades para que la llama del Arte Culinario andaluz siga siempre, como está, muy viva; y de esta forma estaremos contribuyendo a un mayor y mejor estado socioeconómico; ya que, como es sabido, el turismo es nuestra principal industria. Pero éste –el Turismo– no tendría la importancia que tiene sin la gastronomía, al ser una pata imprescindible e insustituible de la industria turística.