Explanada de gasolinera clásica en la carretera, bellísima, que comunica Ronda con Algodonales y Sevilla. Surtidores de gasolina y gasóleo aparcamiento fácil y un cartel muy presente: Voltasur. Si os gustan las mejores carnes, acariciadas por el calor de las brasas, habéis llegado a la gloria.
Un bar de grandes dimensiones, el clásico bar de área de descanso, es el recibidor previo al universo Voltasur, ese cachito de gloria para los sentidos creado por Guillermo Serrano.
Es un cocinero comprometido con su entorno, con esa Serranía de Ronda, que ofrece su escenario 360 grados a quienes se acomodan en una terraza panorámica. Es, también, un maestro de los fogones y las parrillas, comprometido con la calidad, comprometido con la clientela.
Está enraizado en la cocina clásica, lo que le permite elaborar un salmorejo celestial o una presa ibérica de otra galaxia, y tiene la libertad creativa para atreverse con unas gyozas de ternera… en rojo, que dejan, literalmente, sin palabras.
Os contamos ahora un almuerzo rápido en Voltasur. Nivel 10 de satisfacción, con un aliciente extra: aquí no os cruzaréis con críticos gastronómicos desfasados, de los que todavía añoran los componentes sintéticos o los nitrógenos congeladores, tampoco encontraréis inspectores de la guía roja que solo se preocupan por el hilo de los manteles. Ellas y ellos… se lo pierden.
SOPAS FRÍAS ANDALUZAS, ELEGANCIA NATURAL
Más de 34 grados a la sombra, tiempo bochornoso y la necesidad de reponer fuerzas tras una mañana de trabajo en Ronda. La terraza de Voltasur, volcada sobre la Serranía, en el centro de un circo de picachos poderosos, lanza una primera oleada de paz a quien la visita. Esa bienvenida llega acompañada de la fragancia de las maderas de encina y olivo que animan las brasas, casi encapsuladas a más de 40 metros de la clientela.
Ahora entra en escena la magia del paisaje de Ronda y la magia del equipo de sala de Voltasur, con un conocimiento soberbio del producto.
Ya es, con todo merecimiento, el tiempo del salmorejo. Guillermo, “Guiller” Serrano elabora terciopelo rojo. Sí, una sopa fría con cuerpo, pero muy sedosa, con un sabor profundo en el que se percibe el toque de un gran vinagre, en la que divierten las notas de huevo y jamón ibérico presentes en dosis exactas, nada invasivas.
Si digo que este salmorejo es un regalo para el cuerpo y el espíritu diréis que exagero… tenéis que probar este placer, exquisito y nada pecaminoso. Directo al Top 3 de las sopas frías andaluzas 2021.
En Voltasur no se necesita aire acondicionado: el salmorejo aplaca el calor corporal mientras el paisaje majestuoso relaja el espíritu. Como diría George Clooney con el Nespresso. “what else?”.
MEDIAS LUNAS ROJAS, EXOTISMO EN DOSIS MAGISTRALES
Un almuerzo rápido en Voltasur impone revisar el capítulo creativo de Guillermo Serrano. Las empanadillas japonesas de ternera, las gyozas con el sello de un mago de las carnes, impresionan nada más llegar a la mesa.
Son medialunas rojas, colocadas con la delicadeza de un pintor sobre el lienzo. Estética, preocupación extrema por tocar la fibra sensible de las personas sentadas a la mesa, es la seña de identidad de un artista total.
Primer bocado, primera fiesta. Carne finísima, que realza su fuerza con una masa de consistencia perceptible, nada blandengue. Diferente, divertida, que te lanza a una vuelta rápida por la gastronomía más lejana sin desligarse de una ternera elegante, aromática, criada a pocos kilómetros de Ronda.
Todo un descubrimiento para personas que persiguen las mejores experiencias… en la mesa y en la vida.
PRESA IBÉRICA, 30 ELEGIDOS PARA LA GLORIA
Último plato de este menú rápido: presa ibérica a la brasa a la manera de Guillermo Serrano. Una carne brillante, jugosa, que ha dialogado con las brasas a distancia respetable, unas verduras asadas con aromas ahumados super elegantes y unas patatas fritas de verdad, crujientes sin exceso, que impresionan por sus sabores potentes. Nada más… y nada menos.
Hemos hablado ded 30 elegidos para la gloria, si, de los 30 cochinillos adquiridos por Guillermo para el desarrollo completo de su crianza, para la supervisión de su crecimiento a lo largo de más de un año. Esa es la diferencia. En Voltasur supervisan sus ibéricos de principio a fin. Aquí no hay gato por liebre.
Se percibe desde el primer bocado a esa carne suprema, sin sal, sin salsa. Fragancia de campo, de dehesa, que recorre el paladar con parsimonia y distinción. Ahora nos explicamos porque Guillermo Serrano se preocupa tan profundamente por el origen de las carnes que se ofrecen en Voltasur.
En este centro Gourmet de Ronda no hay sitio para piezas que hayan recibido vitaminas extrañas o medicamentos dudosos, en una palabra, no caben las manipulaciones que arruinan las experiencias de la clientela en la mesa.
La presa es una fiesta total. Satisface por la sintonía con los restantes ingredientes de… la tabla, presentada como una escultura.
MANZANA, OTRA DIMENSIÓN DEL ARTE
Ya en los postres, con sensación de plenitud por la calidad de la experiencia y, muy importante, sin la menor pesadez, un capítulo en el que también contribuyen unos vinos majestuosos de Ronda, del entorno que está ante nuestros ojos durante todo el almuerzo.
Un pastel con su base crujiente, que se deshace en el paladar, con su manzana cortada minuciosamente con un dulzor comedido, con toques de miel suprema y con helado de vainilla es el postre emblemático de Voltasur. Delicadeza, distinción, naturalidad… es un postre que deja un recuerdo satisfactorio, sutil. Impecable y emocionante.
EL MEJOR ESCENARIO PARA DISFRUTAR DE LOS VINOS DE MÁLAGA.
La riqueza enológica de Ronda evoluciona y sorprende. Es una realidad que comprobamos especialmente en los restaurantes de la ciudad donde siempre seguimos descubriendo novedades que nos encantan. Es el caso del blanco de bodegas Viloria, Lagarejo, elaborado con viogner y Sauvignon blanc. Aromático, afrutado, envolvente, perfecto para arrancar una estupenda comida. Bastante desconocido aún en la costa de Málaga.
El rosado elegido para la experiencia en Voltasur es un clásico de Bodega Joaquín Fernández, Finca los Frutales, un goloso coupage de merlot, garnacha y syrah. Un vino versátil y transversal. Hay que tenerlo siempre en la bodega personal.
Lo que llega a continuación es de quitarse el sombrero. El tinto de Voltasur elaborado a partir de sus propios viñedos por Bodegas Vetas. Ribera de los Frailes, un tinto de autor 100 por cien petit verdot con doce meses de barrica. Vinazo de Ronda perfecto para degustar cualquier de las carnes sobresalientes de Voltasur.
Como broche final uno de Cádiz. Todo un clásico, Néctar de González Byass elaborado con Pedro Ximénez con 9 años de crianza en el sistema de criaderas y solera. Vinos que forman parte de nuestra vida y nos siguen sorprendiendo, así como reconfortando. Por el placer de disfrutar el vino.
Voltasur, el restaurante de Ronda volcado en la Serranía, enraizado en el entorno, permite saborear el embrujo de una cocina noble, heredera de aquella que enamoró a los primeros turistas exquisitos de la historia: los Viajeros Románticos. La Leyenda sigue viva.
