Estás sentado a menos de 20 metros de la Iglesia de San Juan, una de las 4 más antiguas de Málaga capital, en un restaurante que luce orgullosamente el nombre de Bendito. ¿Cómo se puede almorzar y cenar si Mario Rosado y Javier Campos se encuentran al frente de sus fogones? Sí, has acertado de lleno: aquí, se come divinamente.
Bendito es un nuevo soplo de frescor, de creatividad y de respeto al producto local sin renunciar a las influencias de Italia, de México o de Extremo Oriente. Es cocina malagueña, de la mejor, apoyada en la enorme calidad de las personas que trabajan entre sus cuatro paredes. Esa vivacidad, esa alegría, se percibe en cada propuesta, mostrando la fuerza del tejido gastronómico en la nueva capital del Mediterráneo.
Sus platos son tan vibrantes como el tartar de tomate ecológico con burrata y pesto con anacardos, tan exquisitos como el brioche de ventresca de atún, o tan supremos como los aguacates y alcachofas a la barbacoa con mortadela de Bolonia.
Hablamos de impactos directos en los sentidos, de mensajes que se graban en tu cerebro para manifestarse en cuanto contemplas una imagen de esa propuesta. Sí, son platos repletos de personalidad y de ¡singularidad!
Bendito es, también, un servicio de sala joven, profesional y entregado a la clientela. Un verdadero regalo por su cercanía y su conocimiento.
Debemos añadirse un precio ajustado, podríamos decir que muy prudente si se considera el nivel Gourmet de cada propuesta: poco más de 30 euros por persona con dos vermuts para arrancar y 3 copas de diferentes vinos de Málaga en todo el almuerzo. Super Recomendable.
LO MEJOR DEL MEDITERRÁNEO
Otra fórmula para la ensalada que abre este almuerzo, una vuelta de tuerca a las propuestas más habituales. Mario Rosado y Javier Campos han diseñado un tartar de tomate ecológico, que se elabora minuciosamente y respeta al máximo el producto original, para emparejarlo con una “burrata di latte pugliese” y pesto con anacardos.
Frescura en el paladar, sí, y también suntuosidad. La burrata original italiana, ese queso cremoso con un toque láctico muy elegante, se asocia con una combinación de pesto y anacardos que ponen su contundencia en el resultado final. Equilibrio total, no falta nada, no sobra nada. Es un plato vibrante, con toda la magia de las tierras que rodean el Mediterráneo. Genial para cualquier época del año.
EL BOCADILLO DE ATÚN SE VISTE DE SMOKING
El atún de Bendito es un aristócrata de la mesa, un lujo que llega a cada comensal tras un trato reverencial tanto en la cocina como en la sala. Su fórmula: brioche casero, lámina de ventresca de atún rojo glaseado, trufa de invierno y queso andazul micronizado con ajo negro.
Detrás de ese título hay un bocado de atún celestial, que se acompaña de un brioche totalmente artesanal con un 38 por ciento de mantequilla y un punto crujiente. La combinación es impecable, se aprecian aromas y sabores que multiplican el poder del atún.
El queso andazul, el queso azul de Cádiz reforzado con “perdigones” de ajo negro, más la trufa de invierno, los dos caprichos Gourmet que se espolvorean sobre el plato, añaden los toques sublimes.
Descarga total de emociones. Elegancia suprema que te deja con la boca abierta y los ojos en blanco, como corresponde a un atún de gala. Es uno de los platos del año a todos los niveles, sí, desde San Sebastián hasta Barbate. Para “peregrinar” 100 veces seguidas a Bendito… y no exageramos nada.
ALCACHOFAS Y AGUACATES ECO, BRASAS ACARICIANTES
Vamos directos a una cocina saludable y sostenible, con elaboraciones poco recargadas. Es el mantra que sobrevuela ahora mismo cualquier fogón gastronómico con inquietudes pero con los pies en la Tierra.
Las alcachofas, que están en plena temporada en las fincas ecológicas de Málaga, y los aguacates más untuosos alcanzan niveles estratosféricos cuando pasan por la barbacoa. Esas brasas acariciantes proporcionan unas notas nuevas a los vegetales para contrastar con: el huevo de corral encargado de coronar el plato, la mortadela de Bolonia y la miel de acacia.
El primer bocado despeja cualquier interrogante. El crujiente de unas alcachofas que se deshacen en el paladar, la fuerza verde del aguacate, el huevo de campo, todo sabor en amarillo profundo, el refinamiento de la mortadela… ¿qué más se puede pedir? Es una fiesta permanente que te pinta una sonrisa enorme en la cara.
El colofón a esta experiencia gastronómica la puso el maridaje con Pernales Rosado. El vino de Bodegas Málaga elaborado con la variedad Syrah y con cepas cultivadas en la Finca Vista Hermosa, en pleno corazón de la Sierra de Málaga.
Experiencias reconfortantes, plato tras plato, con presentaciones naturales cargadas de color. Así resumimos este almuerzo en Bendito, el concepto más reciente de dos colosos, Mario Rosado y Javier Campos. Son el presente de la mejor cocina de Málaga, como ya confirmaron con su protagonismo en la primera Apericena 10 Grandes de Málaga de 2020.
También marcan el futuro más creativo, más disruptivo, pero sin renunciar nunca a su enraizamiento en el territorio mediterráneo. Gran experiencia. Aquí se está cocinando el mañana, todo un imán para quienes aprecian caminar en cabeza.
Cocina vibrante a partir de productos de cercanía. Manuel Rosado y Javier Campos están poniendo los fundamentos de una cocina malagueña del mañana, con identidad, con una personalidad mediterránea imposible de encontrar en otros enclaves. Es un trabajo sensacional, realizado de un modo discreto y con un seriedad. Hay mucho futuro.
Cocina vibrante a partir de productos de cercanía. Manuel Rosado y Javier Campos están poniendo los fundamentos de una cocina malagueña del mañana, con identidad, con una personalidad mediterránea imposible de encontrar en otros enclaves. Es un trabajo sensacional, realizado de un modo discreto y con un seriedad. Hay mucho futuro.